Cortesía de Iñaki Guadalajara, excelente crónica del pasado sábado:
Las consignas antes del partido quedaron claras para Derecho. Balones fuera, rehusar los puntos de contacto de la potentísima delantera Arlequinada del Alcalá (CDH) y a correr el intervalo o las bandas. Y a pesar de que la delantera de los Leones Rojos de Derecho , tardaron porque son de letras, al final lo entendieron.
Se inició el partido con un rápido ensayo del Alcalá (CDH), con las fuerzas y los pulmones intactos, que inesperadamente, lejos de dejar fríos a los juristas, les metió en el partido definitivamente. Continuó la primera parte defendiendo duramente los del León las envestidas de la pesada delantera de los locales. No obstante, por fin, salió el primer balón claro a los tres cuartos y fue posible el primero de los ensayos de Derecho. Descanso, balones fuera como consigna, mantener la defensa ordenada y derecho volvió en la reanudación del partido para íntalarse en la veintidós contraria, consiguiendo dos ensayos más, desbordando por las bandas mediante la continuidad de los tres cuartos con pases precisos que esta vez no se cayeron al suelo.
1 -3 y Alcalá iba a demostrar con contundencia lo que sabe hacer con su delantera. Un mol perfectamente ejecutado, girando de derecha a izquierda, más de 600 kg avanzando que termino en ensayo. Misión cumplida para el Alcalá. Era de esperar pero iba a ser limitado por su actual falta de entrenamiento (y no hay duda de que este pequeño detalle se corregirá para futuras ocasiones). Un fallo en el pase de los de Alcalá sobre la línea de marca, interceptado por Derecho y con un esprint impropio de la edad les daba a los del león rojo el definitivo 2-4.
Un partido en una mañana espléndida, unos árbitros magníficos, lleno de buen juego, buenas sensaciones, pocas protestas y ninguna “discrepancia en pareceres”. Un tercer tiempo de cerveza y macarrones y la invitación formal para que la casa del CDH sea el refugio de los Veteranos de Derecho.
Collado, escribía el lunes en agradecimiento a sus compañeros del Alcalá :
“Gracias a todos por los buenos ratos del sábado, estoy seguro de que será el primero de muchos pues esto no ha hecho más que empezar. Yo pensé que no volvería nunca más a jugar al Rugby y de momento ya llevo dos partidos. Ahora sólo me hace falta disfrutar de al menos una victoria y para esto hay que trabajar un poco. Sé que todos tenemos la vida un poco más complicada que cuando teníamos 20 años pero también el nivel de exigencia es menor, solo hace falta estar un poco en forma (esto lo puede conseguir cada uno por su cuenta y no está sujeto a horarios), entrenar los jueves (al menos los que están próximos a los partidos) y quedarse después a tomar algo (para entrenar el tercer tiempo y charlas con los amigos). En cualquier caso, a mí ya me habéis dado la oportunidad de vestirme de corto de nuevo y de estar magullado un lunes, con el cuerpo dolorido pero relajado y con una sonrisa tonta en la cara. Gracias a todos por el regalo.”
Esta es siempre la mejor crónica (aunque mil veces repetida) de un partido de rugby de veteranos: Encontré tiempo para regalarme algún entrenamiento, me reuní con otros para disfrutar de mi mayor afición y compartí una vez más la magnífica sensación del el éxito de la superación personal.
Iñaki
Las consignas antes del partido quedaron claras para Derecho. Balones fuera, rehusar los puntos de contacto de la potentísima delantera Arlequinada del Alcalá (CDH) y a correr el intervalo o las bandas. Y a pesar de que la delantera de los Leones Rojos de Derecho , tardaron porque son de letras, al final lo entendieron.
Se inició el partido con un rápido ensayo del Alcalá (CDH), con las fuerzas y los pulmones intactos, que inesperadamente, lejos de dejar fríos a los juristas, les metió en el partido definitivamente. Continuó la primera parte defendiendo duramente los del León las envestidas de la pesada delantera de los locales. No obstante, por fin, salió el primer balón claro a los tres cuartos y fue posible el primero de los ensayos de Derecho. Descanso, balones fuera como consigna, mantener la defensa ordenada y derecho volvió en la reanudación del partido para íntalarse en la veintidós contraria, consiguiendo dos ensayos más, desbordando por las bandas mediante la continuidad de los tres cuartos con pases precisos que esta vez no se cayeron al suelo.
1 -3 y Alcalá iba a demostrar con contundencia lo que sabe hacer con su delantera. Un mol perfectamente ejecutado, girando de derecha a izquierda, más de 600 kg avanzando que termino en ensayo. Misión cumplida para el Alcalá. Era de esperar pero iba a ser limitado por su actual falta de entrenamiento (y no hay duda de que este pequeño detalle se corregirá para futuras ocasiones). Un fallo en el pase de los de Alcalá sobre la línea de marca, interceptado por Derecho y con un esprint impropio de la edad les daba a los del león rojo el definitivo 2-4.
Un partido en una mañana espléndida, unos árbitros magníficos, lleno de buen juego, buenas sensaciones, pocas protestas y ninguna “discrepancia en pareceres”. Un tercer tiempo de cerveza y macarrones y la invitación formal para que la casa del CDH sea el refugio de los Veteranos de Derecho.
Collado, escribía el lunes en agradecimiento a sus compañeros del Alcalá :
“Gracias a todos por los buenos ratos del sábado, estoy seguro de que será el primero de muchos pues esto no ha hecho más que empezar. Yo pensé que no volvería nunca más a jugar al Rugby y de momento ya llevo dos partidos. Ahora sólo me hace falta disfrutar de al menos una victoria y para esto hay que trabajar un poco. Sé que todos tenemos la vida un poco más complicada que cuando teníamos 20 años pero también el nivel de exigencia es menor, solo hace falta estar un poco en forma (esto lo puede conseguir cada uno por su cuenta y no está sujeto a horarios), entrenar los jueves (al menos los que están próximos a los partidos) y quedarse después a tomar algo (para entrenar el tercer tiempo y charlas con los amigos). En cualquier caso, a mí ya me habéis dado la oportunidad de vestirme de corto de nuevo y de estar magullado un lunes, con el cuerpo dolorido pero relajado y con una sonrisa tonta en la cara. Gracias a todos por el regalo.”
Esta es siempre la mejor crónica (aunque mil veces repetida) de un partido de rugby de veteranos: Encontré tiempo para regalarme algún entrenamiento, me reuní con otros para disfrutar de mi mayor afición y compartí una vez más la magnífica sensación del el éxito de la superación personal.
Iñaki